LA CASONA - UN POCO HÚMEDO..

Un par de horas después..
Ella volvió, cerró la ducha, y le quitó las esposas de sus tobillos.
- ¿Que tal has dormido?. - Dijo riéndose.
El asintió con la cabeza y esbozó una tímida sonrisa.
Uf, por fin saldré de esta puñetera ducha.. Estoy mas que tieso de esperarla, si hasta me quedé dormido..
- Hoy hace un día precioso y lo vamos a aprovechar hasta el último segundo. - Dijo riéndose mientras le esposaba las muñecas hacia delante y le pasaba una toalla para que se secase.
El señaló impaciente la máscara de gas.
- Vamos, deja de perder el tiempo y sécate bien. - Dijo mientras le daba un fuerte latigazo en la espalda.
- No me has contestado correctamente. - Dijo riéndose mientras azotaba su espalda con el látigo.
Joder.. Pero.. ¿Como podría contestarle de forma que me oyese a través de esta maldita máscara?..
- Sigues húmedo.. A eso llamas darte prisa?. - Dijo riéndose mientras le daba otro fuerte latigazo en la espalda.
Uffffffff, mi pobre espalda va a quedar para el arrastre.. Pues menos mal que me quejaba de que tenía frío.. Tengo la espalda casi al rojo.. Joder..
- Túmbate y procura no moverte hasta que vuelva. - Dijo mientras le empujaba hacia el suelo y pisaba su espalda.
Genial.. Primero casi me quedo tieso en la ducha y después casi me destroza la espalda.. Es un bonito premio, sin duda.. Será mejor que ni pestañeé..
- ¿Tenías ganas de librarte de la máscara de gas, verdad?. - Dijo mientras se la quitaba, señalaba el suelo para que se tumbase de nuevo y le daba un pisotón. 
- Si mi ama, como desee.
- No te preocupes que no te aburrirás.. Te tengo preparada una buena sorpresa. - Dijo riéndose.