LA CASONA - A TODA LECHE..

¿Divertirme?. Sin duda que me voy a divertir. Será una noche inolvidable, estoy completamente seguro.
Uffff, tengo la garganta como si fuese papel de lija.. No se que me habrá dado, pero nunca había probado algo tan picante..
Y para colmo el puñetero dildo va a toda leche. Espero que sea el de pilas y vaya perdiendo potencia mientras vuelve..
Horas después.
Llegó y abrió la máscara ciega.
- ¿Que tal has dormido?. - Dijo riéndose.
- Muy bien, mi ama. Muchas gracias por ponerme tan cómodo, mi ama.
- Procura no entretenerte y pónte presentable. - Dijo mientras le quitaba las esposas de las muñecas y soltaba sus tobillos de la cama.
- Si mi ama, como desee.
- Pero.. ¿Cómo podré hacerlo si no veo por donde voy?. - Dijo preocupado.
- No necesitas ver nada.. Estás en tu habitación. ¿No me dirás que después de tantos días ni siquiera sabes moverte por aquí, no?. - Dijo riéndose.
- Si mi ama, como guste. No lo necesito.. 
Claro que no lo necesito.. Ahora la ostia que me voy a pegar contra la pared va a ser buena.. Debería de tener un buen sentido de la orientación y saber moverme por aquí.. Pero no.. Apuesto algo a que me voy a empotrar contra algo.. Y sino, cuanto menos me tragaré la mesa.. Seguro..
Guay, he logrado llegar a la ducha sin estrellarme.. Si no tuviese tanta prisa, hasta intentaría graduar el agua.. Pero no.. 
Apenas había caído un chorro de agua helada sobre el, cuando le llamó.
- ¿Se puede saber que estás haciendo?. - Dijo furiosa mientras entraba en el baño y estrellaba el látigo con fuerza contra su espalda.
- Ya voy mi ama, perdóneme, intento darme toda la prisa que puedo. - Se disculpó.
- Túmbate. - Ordenó con voz seria.
- Si mi ama, como desee.