- ¿Estás listo?.
- Si mi ama, como desee. Pero.. ¿Listo para que?.
- Ahora lo verás.. - Dijo mientras le ponía una ajustada mordaza.
- Mucho mejor, y ahora procura no chillar y no te muevas demasiado. - Dijo riéndose
Mierda.. No se a que coño se está refiriendo, pero.. Eso de que serán los veinte minutos mas largos de toda mi vida.. Me ha puesto los huevos de corbata.. Uy uy.. Y para colmo está puñetera mordaza.. Y, como no.. Ella escuchando música tan campante.. Nada de lo que haga logrará molestarla, lo cual está bien, pero.. Quiera que no, no tengo forma de decirle que se detenga.. Absurdo, porque aunque pudiese, me dejó bien claro lo que espera de mí..
- Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhh. - Chilló, mientras la mordaza amortiguaba sus gritos.
Joder.. Joder.. Mierda de calambres.. ¿Veinte minutos?. Ostia, ostia.. Ahora lo entiendo todo... Sigo sin poder moverme, las cadenas no me permiten el menor movimiento. Pero no creo que me quede ni un maldito músculo sin contorsionarse..
Pedazo de calambrazos.. Tiene toda la razón, aunque fuesen cinco puñeteros minutos estoy por asegurar que serían los mas largos de toda mi vida..
- Uffffffffffffffffffffffffffffffff. - Suspiró entre dientes.
La verdad que ahora la prespectiva de dormir al raso y bajo la lluvia ya no parece tan incómoda.. Casi que me parece que sería buena idea..
Si al menos me hubiese dejado los huevos sin ahujas.. Pedazo de trallazos que me dan..
De pronto le quitó la mordaza y le habló:
- ¿Que tal estás?. ¿Cómodo?.
- Si mi ama, como desee.
- Me alegro de que te guste.. En tal caso te lo dejaré un ratito más.
- Si mi ama, como guste.
Joder.. joder.. espero poder aguantar un ratito mas sin suplicarle con todas mis fuerzas que me deje descansar.. Tengo que aguantar..
- Tranquilo, será un pequeño calambre, nada que no hayas probado ya. - Dijo riéndose mientras le sacaba el dildo e introducía uno mayor.
- Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh